Una sonrisa bonita, blanca y sana puede ser nuestra mejor carta de presentación. Por eso, uno de los propósitos que os aconsejamos cumplir, es haceros un blanqueamiento dental, si todavía no os lo habéis hecho.
El blanqueamiento dental es un tratamiento de odontología estética que tiene por objetivo eliminar las manchas dentales y hacer que la dentición adquiera una tonalidad más blanca y brillante. La actual popularidad de la estética ha convertido a este procedimiento odontológico en uno de los más solicitados de los últimos años.
A la hora de poner en práctica un tratamiento blanqueador se deben efectuar una serie de PROCEDIMIENTOS, que tienen por objeto poner de manifiesto todas las situaciones que puedan contraindicar la evolución del tratamiento, o disminuir su respuesta, así como el obtener resultados buenos y duraderos, de una forma segura para el paciente:
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ANÁLISIS DEL PROBLEMA ESTÉTICO
Todo tratamiento blanqueador debe iniciarse con una entrevista con el paciente con el fin de revisar su historial, y detectar los hábitos y las patologías que haya podido sufrir y que puedan haber contribuido a discolorar sus dientes. Así como los tratamientos blanqueadores que se haya efectuado con anterioridad, y el grado de respuesta de sus dientes a los mismos.
Es importante también averiguar posibles alergias y si padece sensibilidad dental para poder valorarla adecuadamente y establecer los protocolos de prevención.
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PREVENCIÓN DE LA SENSIBILIDAD DENTAL
En pacientes que presenten sensibilidad dental es conveniente emplear agentes desensibilizantes antes del inicio del tratamiento. Se trata de un gel de liberación continua que contiene nitrato de potasio y flúor, que permite prevenir y aliviar la sensibilidad dental que puede aparecer en el blanqueamiento, y que no interfiere en el procedimiento blanqueador.
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EXPLORACIÓN INTRAORAL
El siguiente paso a efectuar antes de proceder al blanqueamiento dental debe ser explorar clínicamente y radiológicamente la cavidad oral del paciente, para poder detectar las patologías que puedan aparecer (caries, gingivitis, periodontitis, lesiones de mucosa, etc.)
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TERAPÉUTICA ODONTOLÓGICA DEL PACIENTE
Con la finalidad de alcanzar la necesaria condición de salud oral antes de iniciar cualquier modalidad blanqueadora, se deben tratar las lesiones de la cavidad oral, conseguir la estabilidad periodontal, tratar la patología que puedan sufrir los dientes del paciente, y cambiar los tratamientos odontológicos defectuosos que puedan propiciar un daño al diente por parte de los productos blanqueadores.
También es conveniente realizarse una profilaxis antes de iniciar el tratamiento para tener los dientes limpios, libres de tinciones, placa o restos de comida.
Hay que tener en cuenta que estos tratamientos restauradores pueden presentar un color diferente al de los dientes una vez blanqueados, debido a que los materiales de restauración dental no responden de igual forma. Esto se debe comunicar al paciente antes del inicio del tratamiento.
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MODIFICACIÓN DE HÁBITOS DEL PACIENTE
El paciente durante todo el tratamiento debe realizar una correcta higiene oral, evitar la ingesta de alimentos potencialmente discolorantes, fumar y beber licores de alta graduación. Por lo que es conveniente indicarle una serie de normas a efectuar a lo largo del tratamiento, y al menos una semana después de su finalización. De igual forma, también es recomendable evitar la ingesta de alimentos y bebidas fríos, calientes o ácidos para no generar sensibilidad dental.
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TOMA DE COLOR DE LOS DIENTES A BLANQUEAR
Para facilitar este procedimiento debe emplearse un número para valorar el color de un diente o el grado de blanqueamiento alcanzado. La transformación del color de los dientes en números se puede conseguir de manera subjetiva u objetiva.
La toma de color subjetiva se realiza con guías de toma de color dental, seleccionando aquel testigo cuyo color más se parezca al del diente valorado.
Para la toma de color objetiva se emplean los espectrofotómetros, que son instrumentos que proporcionan el color de los dientes mediante los valores numéricos de las guías, registrando los parámetros de color.
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FOTOGRAFÍAS DENTALES EN BLANQUEAMIENTO DENTAL
Con el fin de que el dentista y el paciente puedan apreciar de forma visual como los dientes modifican su color mediante el tratamiento blanqueador, es necesario efectuar una serie de registros fotográficos.
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CONSIDERACIONES POSTRATAMIENTO A TENER EN CUENTA
A la finalización del tratamiento blanqueador es conveniente poner en práctica procedimientos de remineralización de los tejidos duros dentarios durante una o dos semanas, para compensar los efectos que los agentes blanqueadores hayan podido ejercer sobre estos tejidos y recuperar sus propiedades.
También es conveniente que el paciente evite fumar y la ingesta de alimentos discolorantes, con la finalidad de disminuir la interferencia que ambos pueden provocar en los agentes remineralizadores y en la estabilización del color dental logrado.
Igualmente es importante informarle la necesidad de mantener una correcta higiene bucal, de la importancia de asistir a las revisiones de control, y cumplir los protocolos de mantenimiento.
PRODUCTOS DE BLANQUEAMIENTO DENTAL
El sistema en nuestra clínica consiste en combinar POLA OFFICE+ (PERÓXIDO DE HIDRÓGENO AL 37,5%) para el blanqueamiento en consulta y POLA NIGHT para el blanqueamiento domiciliario.
POLA OFFICE+ (PERÓXIDO DE HIDRÓGENO AL 37,5%) se trata de un producto que requiere de un tiempo mínimo en la consulta. Con su jeringa auto mezcladora, el tiempo total de tratamiento tomará menos de 30 minutos. Su formula asegura una rápida liberación de los iones de peróxido para comenzar el proceso de blanqueamiento.
Pola office + es un tratamiento mínimamente invasivo con el máximo confort para el paciente. Su fórmula de gel pegajoso maximiza la adherencia al diente y el efecto blanqueador, y se puede utilizar con o sin luz. Contiene nitrato de potasio para inhibir la sensibilidad.
Para obtener unos resultados más duraderos se recomienda combinarlo con POLA NIGHT (PERÓXIDO DE CARBAMIDA AL 10 O AL 16%), que consiste en utilizar férulas de blanqueamiento elaboradas por nosotros llamadas essix donde aplicaremos en producto blanqueador de baja concentración únicamente sobre la superficie externa de la corona de dientes. Lo ideal es ponerse la férula entre 6 u 8 horas, por lo que recomendamos hacerlo antes de ir a dormir.
